NORWALK.- Cumplir 100 años o más es una bendición, ya
que no todas las personas llegan a esa edad. La hispana, Clotilde Almanza,
celebró su cumpleaños 106 con EL SOL News, partió su pastel y compartió su vida con el Semanario de la
Familia Hispana.
Doña Clotilde, es originaria de Acopaya, Chontales,
Nicaragua, y nació el 6 de julio de 1907. Estudió en la escuela Rafaela
Herrera, donde cursó solamente la educación elemental.
A los 17 años quedó huérfana de madre, y seis días después del fallecimiento de su progenitora, María Gutiérrez de Reyes, murió su padre, Nieves Reyes.
Es la mayor de ocho hermanos, dos de ellos aún viven.
Sus hermanos son: Juan Agustín, Guillermo, Crescencio, Salvadora, Ventura,
Socorro y Onofre.
Su esposo se llamaba Federico Almanza, con quien se
casó cuando tenía 18 años, es decir, en 1925, y con quien procreó cuatro hijos
y son: Williams, Rosa, Josefa Lucila y Cristina.
Actualmente doña Clotilde sufre de demencia y
artritis, recuerda poco debido a su edad, sin embargo, en ocasiones, suele acordarse
de que nació en Nicaragua y de cuando ella vino a los Estados Unidos, donde fue
pedida por sus familiares y ahora es ciudadana americana, de acuerdo con su
sobrina, doña Idalia Núñez.
EL SOL News conoció que ella reside en los Estados
Unidos desde que cumplió los 71 años, es decir, desde 1978. Antes de residir en
este país vivió en Costa Rica, cuando contaba con 53 años, en 1960.
En Norwalk, trabajó en el Norwalk Economic Opportunity Now, Inc. (NEON), en la South Main Street, donde enseñaba cómo realizar trabajos manuales, entre otras actividades.
Ahora, ella vive con su sobrina Idalia Núñez, y su
hija Rosa Almanza, quien cuenta con más de 80 años. Dos muchachas también
ayudan en sus cuidados: Nery Pérez, quien la atiende los fines de semana y
Vilma García, de lunes a viernes, ambas trabajan de Home Health Aide (HHA), en el cuidado de personas mayores, de la
agencia Home Choice.
Es evaluada por los médicos cada semana y recibe cuidados especiales; es muy querida por los especialistas que la ven, comentó doña Idalia.
Su vida diaria varía, ya que en ocasiones se muestra
activa y muy platicadora, jovial y alegre, o a veces prefiere descansar en su
cama y dormir. No come alimentos pesados y digiere la comida poco a poco.
"En ocasiones se pone enojada pero por lo general es muy alegre. Es una bendición llegar a los 106 años. Es como una bebé, a veces se pone traviesa", relató doña Idalia.
Doña Clotilde es muy cristiana, amante del Señor
Jesús, siempre está pendiente de su Biblia y en ocasiones sus familiares le
leen pasajes de la misma.
Miembros de la Iglesia Bautista Bethel, de Bridgeport, cada semana llegan a su casa a compartir la Palabra de Dios, a hacer servicio y a orar por ella. La celebración religiosa es dirigida por la pastora Aida Carrasquillo.
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